A diferencia de otros AINEs que son ácidos carboxílicos, los oxicams son ácidos enólicos que comenzaron a introducirse en la terapéutica a finales de los 70 como AINE de semivida larga que permitían una sola toma diaria, algo especialmente importante en el tratamiento de procesos inflamatorios y dolorosos crónicos.
Los más utilizados son el piroxicam (cabeza del grupo y el primero que fue introducido en la terapéutica), el tenoxicam y el meloxicam. Dentro de este grupo también se encuentra el profármaco de piroxicam: lornoxicam (1).